8.9.09

Naufragios

Hoy soy piedra, no movimiento.
Hoy soy hoja, no soy viento.
Nuestras noches no serán mas noches
si no aquellas poesías heridas.
La noche me cae como piedra
el viento como hoja,
tus ojos son mis manos,
tus manos son mis ojos.
Eres miel,
soy la carne cruda del deseo,
duermo en el mar,
tus roces son sirenas,
me abraza una ola,
ola de calor y frío,
viento y espasmos de noches,
dibujas tu boca en la mía,
soy el cielo,
eres el cielo,
tan enemigos, tan inmorales,
como siempre
como nunca
cuanto antes.
Eres poesía, déjame escribirte,
déjame añorar un poco de ti,
déjame arrancar de la melancolía,
somos más nosotros,
ya no existe el viento.
Arte cargada de acciones explosivas,
tardes explosivas,
agitamiento explosivo.
El mar besa el último silencio,
no volveré a arrancar,
no volveré a huir,
no prometeré nada,
no soy un ángel,
no eres un ángel,
somos mas nosotros en el naufragio de esta noche.
Cierra los ojos, prueba el bocado,
aliña la frase para que sea nítida,
cierra los ojos, cambia la ruta,
diversifica el paisaje,
somos imaginación,
somos clima.
El miedo se hace espeso,
continúo inhalando viento,
oxígeno polar de estrellas,
de nubes como flores adornando,
eres un sueño,
soy nada,
eres nadie,
¿somos?
naufragamos.

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