29.3.10

Ves...?
la vida se nos vino abajo
y nosotros pasamos el tiempo mirando hacia el cielo
como intentado encontrar una respuesta.

Arrastramos la nostalgia de una sociedad que echa de menos
echar de menos los viejos tiempos.
Me veo buscar alguna huella en los recuerdos del calendario,
la huella del día perfecto, contigo.

Viajamos en lo diáfano de la persona singular
y la metáfora más idiota,
sólo porque no nos gusta lo que nos dicen los espejos.

Comprendí demasiado pronto que estrellarse contra el asfalto
es la manera más bohemia de hablar de caminos y de pisadas.

Y puedo seguir mi instinto y cagarme la vida
y puedo escuchar mi corazón y ser feliz un rato.

Mi vida sin ti llora más que de costumbre
porque debo desacostumbrarme a una vida
que por nublada que sea es

Mientras tanto monta tu bicicleta morada,
que yo intetaré enfrentarme a la vida.

28.3.10

En realidad me enseñaron que hay que escuchar lo que te dice tu corazón, pero también me han dicho que la mente y el pensamiento son un arma muy importante, entonces no sé que hacer; creo que me llevo mejor con mi corazón en todo caso, el pobre ha sufrido tanto que merece ser feliz.

Tú crees que puedes hacerlo feliz realmente?

27.3.10

De mi, que por ti, ya no

Por un mes estoy así
por un mes
(...)
Y por encaramarme a la rama equivocada
vacía de evocaciones
carcomida de raíces caídas desde otros ojos
iluminada de terciopelos desgastados difuminando mis manos
sobre la espalda
equivocada
de surcos.

…mi tronco herido por tu rayo…

Ya no pertenezco a la savia
que inunda tu ombligo

y tampoco quiero encontrarme
con los labios blandidos de hojas que no son
y gusanos que si están
revolviendo mis pasos
aunque ya no camine
porque la solución es romperme
la
espera
o más tarde los frutos que no me nacen
para acabar pudriéndome las penas en arcadas…

…y después se me repiten
con sabor ácido...
...deambulan por el esternón deshilachado…

Me quiero perder en mi bosque
mirar hacia arriba y que caigan los cipreses.

…que te vayas por el mismo espacio que vaga entre dos roces
y que ya no vuelvas…

Si te das cuenta evito tu mirada
y a la vez huyo sin dejarme huir …
Se me cuelan los pájaros muertos
{fantasmas con labios tatuados de esculturas
sin color marfil}
por el rincón abierto de mi copa tenebrosa ...
Y te dejo dormir en la mortecina sombra
apagada
imprecisa
imperceptible
Soy tan débil como la hormiga que transporta su peso triplicado,
tan enferma como le permito a mi mente,
tan mártir como las veces que me quejo,
tan mala como las penitencias que me impongo,
tan buena como las veces que las ignoro.
Tengo los días contados como todos,
no pierdo tiempo en castigarme si los pierdo.
Prefiero erógeno a lisérgico,
aunque se obtenga de lo mismo,
y constante imperfecto a sintético.
Soy tan fría como el tiempo que tardo en fundir nieve,
tan querida como gente habrá junto a mi tumba,
tan creyente como dioses tengo,
tan amiga como las veces que no te entiendo,
tan feliz como estando lejos, allá en la luna.

23.3.10

Podríamos seguir mintiéndonos
engañándonos
y compadeciéndonos
teniéndonos lástima
llorando

sería mejor dejar de martirizarnos
y aceptar las veces que estabamos
pensando en otras personas
y aceptar cómo se nos fueron los ojos por aquellas
y aceptar que alguna vez mentimos
y que somos malos, crueles en el fondo
que no somos jesucristo
ni la madre teresa
que en algún momento nos odiamos en silencio
que estamos llenos de rabia y de coraje por el ego dañado
que somos lo mismo sin nuestra compañía
que alguna vez, cuando nos separamos, dejamos que
nos besaran las orejas y los labios
sería mejor dejar de compadecernos
que entre más malos nos vemos, duele menos.

22.3.10

Masoquista



Me rompe el corazón

19.3.10

Habría que ir pensando
en algo más sencillo
un laberinto con flechas,
un pasillo con puertas y carteles.
Habría que ir pensando
en reír más que en llorar,
en cogernos de las manos con más gracia,
en yo decirte "te quiero"
y tú en decirme "gracias"
y que quede todo estable.
Habría que ir pensando
en no tocar los cables que sostienen
el puente colgante de esta historia,
que están muy bien así
y ya han sufrido mucho.
Nunca discuto de mentira,
no me obligues, pues, a hacerlo.
Volverá el día de encontrarse,
la primavera
y hasta el invierno.
No entendamos las cosas en línea,
que todo es ciclo,
agua que salta, agua que vive,
y cabezas que se inclinan sonriendo
y menos suspicacia.
Yo lo firmo y tú lo firmas
¿a qué estamos esperando?
Un contrato que no nos mienta
con la letra chica,
que no diga por qué nos vamos sin depedirnos.

17.3.10

y si te diera todos los besos del mundo?

14.3.10

Fui un títere
pero no importa,
ni siquiera supe quien manejaba mis cuerdas.

Quien ocupaba este espacio azul poético,
quien ocupaba esta historia
y escribia la suya al paralelo.

Tú y yo somos cobardes,
aún tengo mil reproches que hacerte
Yo y tú un poco dementes,
un poco a medias, un poco a solas,
un poco nulos, un poco nada.

11.3.10



Quiero que me abrazes fuerte


Quiero beber fantasías de tus labios

Quiero olvidarte de una sola vez


10.3.10

Caja fuerte

Si yo hubiera podido guardarte en ese instante, cuando olvidabas sus pestañas y te concentrabas en mis manos y en mi boca. Te hubiera escondido en un cofre, pequeño el cofre, sólo para mí. Te hubiera hecho polvo y te hubiera inhalado una y otra vez hasta quedar (más) imbécil. Te hubiera guardado en un cofre pequeño, para enloquecerme mientras te escuchase diciendo que me quieres. Te hubiera abrazado. Te hubiera deseado el cuerpo completo con el alma para llenar mis vacíos. Me hubiera seguido equivocando contigo y hubiera sentido el amor más tímido y adolescente al hacerlo. Si yo hubiera podido guardarte en ese preciso instante en el que no descubrí que no mentías, y que mentía yo diciendo que no me importaba ni un poco, definitivamente estaría completamente loca de amor. Es que era todo. No eran sólo esos momentos en los que sus pestañas desparecían, y le asesinábamos acompasando nuestros cuerpos con furia, de la forma más animalesca posible. Y contigo en la caja ... yo me hubiese encerrado contigo, te hubiese besado con furia, te hubiese abrazado con furia, te hubiese regalado mi puta existencia. Y te hubiera obligado a mentirme y traicionarme para tener cosas qué escribir. Si yo hubiera podido guardarte en el miserable, cobarde y brevísimo instante en que te obligué a decirme "Yo también te quiero", en el maldito instante en que por un solo segundo te olvidaste de su sombra y de sus brazos y te aferraste a los míos, estaría más perdida ahora, y con el corazón encencido. Tal vez creería que te inventé, y no que pasaste por mi cuerpo sólo buscando abandonarte para sentirte enorme. Porque sabías que podías y que no iba a negarme. Porque sabías que te dí todo el derecho de jugar conmigo, de hacer lo que quisieras. Si te hubiera marcado más veces mis labios en tu espalda, o en tu cuello, y te hubiera guardado en el maldito cofre, seguro que nadie más podría leer lo que quise escribir con ellos, y cómo quería que sólo tú lo supieras - ahora me otorgo el derecho de contarlos yo misma a quien a mí me plazca.- Ahora no escribo con los labios : escribo con los dedos. Recuerdalo. Te habría guardado para mi placer culpable, para enfrentar mis miedos, para darte felicidad y libertad (que creo que buscas). Tal vez he olvidado que los mejores versos no se escriben gracias a la perfección: se escriben por fuerza y por valentía. Esta rabia maldita es la que guardo ahora en el cofre, y lo tiro al mar, con fuerza. Ya he comenzado a recolectar trozos míos que quedaron tirados para construir una caja nueva, una caja en la que mi corazón yace dispuesto a limpiar las páginas y empezar un nuevo capítulo.

7.3.10

Recuerdo que el diluvio se detuvo en mi cerebro
duró varios días
ahora que lo pienso,
exageran las leyendas en lo suyo,
cien días de lluvia tampoco podrían matarnos.
Una persona juntaba su frente con la mía.
Estoy tranquila,
sé de las mentiras de la guerra.
Aún así lo intento, bajo
hasta el estado de conciencia límite y lo veo:
yo me enamoré de la persona equivocada,
le amé de una manera que no volvió a repetirse.
Todo va con freno ahora,
una risa sin excusa le embellece.
La decadencia se quedó allá lejos.
Te haré un resumen:
el beso siempre es plural,
se va desenredando uno tras otro.
Siendo bueno, tal vez no te reíste de mí,
queriendo yo engañarte
me perdiste entre tus manos.
Yo soy mujer que nació para estatua
y así está bien,
tú eres más bien como el mar
que nunca viajó y nunca paró,
que sólo ve pasar viajeros.
Buscando mi paz, creaste mi alarma,
tomando yo mi parte del corazón medio vacío
te quedaste tú la más grande.
Debí desconfiar de confiarte,
ya sé que no sabes mis secretos,
pero ejerciste derechos sobre ellos
en medio de una confusión desértica.
Captas más de lo que dices,
yo me miento,
no me asaltes más,
ni dormida, ni despierta.