26.1.11

Otra vez

todos somos un capítulo en la vida de alguien
lo difícil es escribir encima
borrar palabras
eliminar plurales
tacharlo todo
borrar con fuerza
y escribir frases nuevas

22.1.11

voy tachando cosas que quería hacer y algunas (varias) que no
quería tanto.
pienso en que mañana siempre puede ser otro día,
pero también creo que hoy es una cuenta vacía con un viaje suspendido,
un beso a medias,
un cigarro vespertino,
un par de risas lentas

no quiero (puedo) admitir

que me canso a veces (tantas) de adolescer mi adolescencia

21.1.11

Si supiera nadar

las historias de amor casi siempre te las cuentan otros, o las ves y hay algo (un no sé qué) que te hace sentir que tuviste un mar propio dentro de los ojos de alguien que te tomaba de la mano y no te preguntaba nada.

17.1.11

algún día van a entender
o tal vez harán el intento
y descubrirán que no hay
nada escondido
debajo de la lengua
más que el silencio obligado
del miedo al rechazo
todos estamos un poco solos aquí
todos queremos compartir la soledad
- esa que lleva particularmente nuestro nombre -
la forma es diferente
se parece un poco a mí
el único daño que hacemos
(que hicimos tantos)
es callar
todos estamos un poco solos aquí
porque nos duele ese músculo que nos plantaron en el pecho
porque late de forma diferente
y tenemos miedo porque está vivo

11.1.11

está claro que no voy a convencer a nadie y por eso tal vez no lo pretendo. no sé que tan felices serán las lombrices, lo único que sé es que hubo un tiempo en que me sentí tan idiota. nunca he pretendido escribir poesía ni declararme lo contrario, sólo sé que puedo darte todos mis ecos, todas las sombras; piso notas musicales, atrapo silencios. Nunca se me ha hecho tan fácil el amor, escribirlo si, pues; pero es duro saber que no todo es cierto, que la mayor parte de las cosas suceden entre tus dedos, entre tus manos que intentar evidenciar algo que no es; qué bobería!

3.1.11

Me llovió el mar, se mostró triste.
Escapando de tí, coros de ecos.
Hoy he hecho algunas buenas acciones.
He escuchado algunas historias tristes
y me he interesado por los quehaceres (que no me importan)
de alguien a quien no veo hace meses
y, aún así, se ha empeñado
(sin que yo se lo impida, todo sea dicho)
en contarme sus últimas aventuras;
no me molesta ni nada,
ni tampoco es que crea que es una buena acción,
pero es que me gusta escuchar
entonces ya no es tan desinteresado
a veces, tantas, me duermo
y el cansancio no llega hasta alli,
solo las ganas, así en plural,
y juego a que el mundo
es un patio de recreo lleno de personas buscando una pelota
a la que dar patadas.
no hace falta mucho más.
y apareces con tu gesto de adivinadanza
a llevarte mis fantasmas con solo un beso.
Entonces me corro.
A veces.
Tantas.