Te lo digo ahora.

Ahora que es sábado, ahora que ya no tengo sueño.

Ahora que ahora suena reiterativo. Ahora que no tengo miedo.

Ahora que quiero estar contigo mucho rato, ahora que quiero abrir las cortinas.

Ahora que quiero reirme por todo, ahora que te quiero, ahora que siempre te he querido.

Hola, como estás?

No importaban los ojos pero me atrapaba su mirada con una luz infinita, pura, suya, mía, nuestra; se le empañaban los lentes y yo me reía, me besaba con los labios fríos, y me gustaba. De hace rato que me gusta

Cortas llamadas de 3 minutos

Soy feliz
soy feliz porque me haces feliz
y porque me gusta hacerte feliz.
Soy feliz porque estás aquí,
no presente, pero si revolviendo mis neuronas
jugando con ellas
revoloteando dentro de mi
sólo con tu voz.

Susurramos
como antes lo hacíamos,
no sabes lo que me provocas cada vez que lo haces,
se me eriza la piel
el corazón
las pestañas
y te extraño.

Soy feliz
soy feliz cada vez que te tengo conmigo
y siempre estás conmigo,
bailamos con magnolias
besamos la noche
me tomas el ombligo.

No sabes lo feliz que puedes hacerme sentir,
de verdad que soy feliz contigo.

Yo

…y la piel encendida, abandonada a la intemperie
como un tesoro que nadie quiere llevarse
…y el rumor que colecciona susurros en la maleza, tan cerca de todo
…y mi andar zigzagueante de torpeza ciega
quizás una mañana, quizás una garganta interceptada
…y mi ser colmado de excesiva nostalgia
…y las bestias, los fantasmas de la ausencia
de un vida dedicada a hermandades y a utopías
…el querer resucitar en un planeta desolado

Testamento

Seré la transformación
de todo lo que me nombra,
por eso quiero dejarte
mis manos y mis ojos
(mas me veo menos soy)
quiero un cuerpo
que se regenere
en cada poema.

El universo concentrado
en su corazón de cristal
en sus manos pintadas
en mi alma de poeta.

Si la poesía es un diálogo
si somos poesía y diálogo
quizás también somos
el universo concentrado
en el corazón que hoy te piensa.

Si me muero, quiero morirme tuya.

"Ex" varias cosas IV - El Menú

No hay palabras que deban ser negadas
no hay frases que no merezcan ser poesía.
Me decía a los 10 años que todo terminaría pronto,
que el juego era lo mejor de la vida y no importaba más;
ahora 6 años después ... nada sigue muy igual.

Guarda el secreto,
no me dejes,
no me persigas.
Sólo yo me contra-digo.

Más que cualquier cosa soy estúpida
soy ñoña
soy torpe
soy poco ágil
y no muy astuta,
bastante autista en realidad.

Hay algo allá afuera,
algo que quiere matarme,
le alimento el deseo de exterminarme,
de comerme de a poco,
empezar por las uñas, los dedos, los brazos.
Hay algo allá afuera
algo que quiere matarme,
desprender de todo lo que soy/fui/seré
pero no me importa,
mas que carne/alma/corazón/aura
soy estúpida

Para ti

que me alegras a base de palabras y no palabras, para que te alegres también.

Vivan los días felices
los días nublados
los días con mas cantos de pájaros que cantos de noche.
Te beso en frente de las voces,
las voces nos miran y hablan,
murmuran,
susurran,
se esconden,
a mi no me importa nada.
Somos viejos amantes.
Vivan los días de besos sin estadísticas
los días de lluvias de abrazos.
Quiero besarte al dormir
y luego despertarme en tu boca,
quiero correr lejos del viento
y luego arrastrarme en las olas,
quiero besar tu mirada
y luego mirarte a los labios.

Recordé el día en que salí como si nada y me arriesgué a encontrar un par de ojos de los cuales enamorarme .. y de la nada apareciste Tú

y sabes? ... me enamoré

"Ex" varias cosas III

No es tan grave, pero tampoco progresa,
es la absurda cosmología de las cosas,
una tras otra, de par en par
como los ojos y las pestañas
amordazan al ruido de las lágrimas que caen.
Ordenas.

No creo, no es tan grave, pero ya ni regresa,
era la absurda verdad de las cosas,
era una tras otra, nadie entendía,
nadie sabía como gritarle lo que hacía,
ya ni siquiera escuchaba,
era amor y tormento suelto,
de pronto venía la noche más oscura de todas.
Todo era un sueño.

Bipolar III

Hace un rato pensaba en cosas extrañas, le hablaba a mi hermana y ella me miraba con una cara extraña pensando cuantas incoherencias hablaba la pendeja de su hermana (la pendeja era yo). Era raro, era como si mi cabeza planeara sus propios códigos, sus propias lenguas, idiomas, jerogríficos, no sé, era raro. Recordaba viejos nombres, viejas odas, los poemas que leía cuando chica, las historias que inventaba; pensaba en mi anhelo de escribir un soneto, pensaba en las ansias de gobernar un castillo de arena en el país de las maravillas, pensaba que aún no lograba nada.
Se muere Cenicienta y despierta la Bella Durmiente. Peter Pan crece y deja de creer en la hadas, como yo deje de creer en el viejo pascuero; es triste, lo sé, es raro también. Un día me desperté y ya no había sol ni invierno, daba miedo preguntarse por qué hablaba tanta mierda, ya nada se entendía, me preocupaban cosas que a nadie le preocupaban, nada volvió a aclararse, ¿Cómo sabes ahora lo que puede pasarme? ¿Quién eres para saberlo?
Desencadénate el pelo, abrochate los dedos, sujeta las muñecas, dejame besar tu uni-margarita, quédate en este uni-verso, soy alguien que tú no conoces, soy alguien que yo no conozco. Las personas no son sólo cuerpos, no sólo brazos, piernas, labios, ombligos ..., las personas son más que eso pero no sé decirlo cuando estoy sobre una cama, bajo un arbol todo se detiene, el tiempo se detiene, la brisa se detiene, el cielo tibio grita y canta; dejamos de ser huesos, somos almas; nos conectamos, nos desconectamos y seguimos siendo.
Y si, estás, estás aquí-así-sobre-debajo-al lado-en-entre-fuera-más adentro que nunca- de mí, hablando/mostrando/besando/llenando/llorando/buscando/robando todo en mí, todos los secretos que mi cuerpo-alma demuestra. Esto se está pareciendo a una vida. Esto se está pareciendo al amor, porque cada vez que indagas en mí es como si entraras al centro de mi corazón y te robaras parte de él, y sin darme cuenta ya no tengo nada, ya no quedan puntos ni comas ni versos ni estrofas, ya no queda poesía, ya no quedan las ganas de seguir llorando sin motivo, lo único que quiero es que seas parte de mí, y lo digo en serio, en todo sentido.

Estoy mirando algo, no sé bien lo que es pero se siente tibio, es casi como el viento golpeando las flores de una pradera pintada. No sé bien que me hizo, pero me sentí flotando entre nubes y espuma, me sentía como nadando en la euforia de un mar de calma.
No sabía nada de mi pero me conocía tanto, yo nunca supe lo que era pero me gustaba, me alejaba, me acercaba, no lo sé, nunca lo supe, nunca pude entender como hacía para que mis rodillas volaran.
No importaba el frío en la mañana, ni las pastillas que debía tomar cada noche. Llegaba a mi casa, me miraba al espejo y me reía sola, todo se llenaba de palabras extrañas, personitas disfrazadas con uniformes y caras felices.
Nos robaban los colores secundarios y me regalaba una rosa cromática, yo aún no sabía que era, pero algo nuevo me estaba provocando, incluso cuando me escondía entre las frazadas de la cama no me dejaba dormir, rotaba entre el insomnio y el soñar despierta. No era malo, era dulce, era cálido, se volvía oscuro y se iluminaba de nuevo, era algo nuevo, algo que no tenía nombre, pero cuando se juntaban las manos y se entrelazaban los dedos era como si el cielo se juntara con la tierra y las estrellas fueran peces volando por el firmamento monocromo.
Yo nunca supe bien que era o como se llamaba, o como le decía, o como podría decirle, pero cuando te mire a los ojos desde aquí sentí que debía llamarlo amor.

Te debo todo.
El insomnio.
Las ojeras.
Las ganas de morir cuando se acaba el tiempo.
No poder escuchar tu voz a menos de diez metros.
Caminar junto a la pared para no perder el equilibrio.
Todas las ganancias en arena.
El destrozo hecatómbico de la ropa y los recuerdos.
El tiempo en blanco.
El tiempo en negro.
Convertirte en dios.
Convertirme en dios.
Siendo dos convertirnos en uno.
Te debo tanto.
Te amo tanto.

La gran verdad (mentía)

Los perdedores estan ganando,
todo es difícil conmigo,
todo es cansador y es lucha,
contra la pared, contra mi, contra el cielo.
En las calles de un martes por la mañana
mi cerebro se revuelve, mis costillas se contraen,
y yo sigo aquí.
La conciencia me habla, me juzga, me grita,
e insisto, yo sigo aquí, así.
Conceptuando energías, midiendo definiciones,
el sol me habla desde la urbe de esta ciudad,
nosotros nos ocultamos siempre.
Yo soy el viento que despeina tus ideas
dejando una esperanza intacta:
aún no es tarde para sentir.
Soy el caos que ordena tus cosmos
despertando a tu alma:
siempre se debe pedir más.
Somos una revolución
que ha venido del bien y del mal
para hacernos vivir.

Me sentía tan bien,
mi pulmones se llenaban tan bien de aire,
mi boca no podía dejar de sonreír
(tampoco quería)
mi cuerpo entero se exaltaba de felicidad.
Y yo aquí sin poder correr a abrazarte,
no sé, ya te extraño, ya te amo,
ya todo está así, aquí,
no quiero que termine,
pero tampoco me preocupa.
Estaba tan feliz de leer lo que escribías
que yo ya no sabía como reaccionar,
lo único que quería era gritar.

Mensajes nuevos

Representas para mí un mundo totalmente extraño, nuevo, misterioso y virgen. Con esto, no dudes que me apasionaré en tus tierras y trataré de explorarlas (y explotarlas), y adentrarme... Incluso, me he dado el permiso de perderme en ti. Y es que sólo perdiéndome voy a llegar a esos lugares donde nunca nadie más ha estado.

"No hay mucho más que comprender
que leer entre líneas de tus dedos.
Hay aún mucho más por tatuar,
con mi boca
en los poros abiertos de tu cuerpo"

Determinar los tiempos respectivos para no perder ni un segundo más, mientras escribo estos versos, a la distancia que separa mi ojos cerrados de tus labios rojos encandecidos, embravecidos, calientes por mis besos y por los tuyos.

"Pieles juntas, armónico deseo,
mientras te beso no me preocupo de nada,
quizás sólo en hacerte sentir que te amo,
que lo sientas de verdad"

Secreto

No lo sé,
te juro que fue una explosión,
una constelación entera que explotó dentro de mi corazón,
por fin el "creo que yo también"
Ahora bien
hagámoslo en silencio

Hablemos en silencio
para que nadie nos escuche
nunca.
Mantengamos un secreto eterno
para que sólo tú y yo
seamos los cómplices del crimen.
Caminemos de puntillas.
En silencio…
Gritemos sin gemir,
toquémosnos con la vista…
Digámosnos cosas con los ojos
para que nadie sepa…

Para que nadie nunca sepa
que a oscuras somos amantes,
que en la arena de las tardes/noches
somos cuerpos y almas infinitas

Idilio de deseo

En las noches,
A veces,
Cuando mi cama está vacía
De ti,
me siento fría,
me siento incompleta,
extraño tus suspiros en mi cuello.

En las noches,
como estas,
cuando yo estoy vacía, sola y sin ti,
extraño el viaje espacial
de tus ojos cerrados
y los míos apretados con fuerza
mientras nos damos un cálido beso.

Y nos teníamos despacio
- éramos un coro -
yo te hacía poesía
dentro de mi cabeza.

No me viste verte
no me vieron viéndote,
ni van a ver los lunares
que yo te dibujaré
mientras te bese vehemente.

Me arden los labios,
todo se convierte en llamas,
todo me sabe a satisfacción mutua,
tuya y mía.

Y es cierto,
tus besos son más amor que otra cosa,
me elevan hacia el cielo,
me dejan jugar con las nubes,
con tus labios,
con mi lengua,
con todo el amor que siento por ti.

Sólo aquí puedo decirte indirectamente que te quiero,
que me encanta perderte entre mis brazos y besarte,
y besarte nuevamente,
y volver a hacerlo,
hasta saciar/te/me/nos,
hasta colmar mis labios de los tuyos,
hasta colmarme de ti (eso nunca).

No sé como saber que te quiero,
no hay teoría que lo diga,
¿Pero cómo explico entonces esto que siento por ti?
esto que llena mis pulmones de aire
y mi cara de sonrisas.
No lo sé,
por algo intuyo estos sentimientos,
déjame romperme y hacerme pedazos
que quiero que tú me recontruyas
trozo a trozo,
beso a beso.

Red Chord

No sé, es el viento
un huracán de sensaciones,
soy yo la voz del viento,
el insecto submarino
del que todos hablan.
¿qué pasa?¿ya no me reconocen?
¿en qué momento me convertí en lo que soy ahora?
Una extraña para mis mas conocidos,
un simple huésped sin nombre ni apellido,
soy mas bien lo que todos hablan,
un "algo" que nadie reconoce,
y yo ya no sé si esto es una pesadilla,
puede que solo me quede de rodillas
esperando que entiendas que sigo siendo yo
quien mira a través de estos ojos
y llora usando estas lágrimas,
que escribe con las manos
que siempre te refugiaron,
ésas en las que siempre te perdías.
Yo ya no sé si es el día
pero la noche no trae sueño ni frío,
trae ladridos y llantos de perros
que claman al cielo más estrellas.
Y soy yo quien sigue hablando de ellas,
las estrellas que olvidaron mi nombre,
los silencios y las tardes reídas.
Y son ellos quienes no hablan de hombres
ni mujeres que escriben poesía.
No soy Neruda ni Gabriela,
no soy Edgar ni García,
soy simplemente un insecto submarino,
un insecto de alas caídas.

PD: Poema del 2006,
de esos que se encuentran en cuadernos
de hojas amarillas y roñosas

Les Jours tristes

Sé que sueño contigo, aunque no sepa quien eres cuando lo hago, libremente lo siento, sé que no hay nadie que me haga sentir lo mismo que tú.
Tienes razón, no sé muy bien de lo que hablo porque siempre te reconstruyo pieza a pieza, abriendo los ojos para abrir la boca con cada engranaje.
No es sólo una cuestión de tobillos y muñecas, es una cuestión de "es imposible perder el tiempo contigo".
Digamos "abrigo de aire inspirado"
para hablar de cuando tiemblas
y sudas
y pones cara de "voy a hacerte lo que me pidas
y lo que no también".
Esas cosas, esas buenas manías de dejarnos la piel y acercarnos al momento, para morir de espasmos y vivir de sed para saciarnos de tú y de mi.
Puede ser que el problema sea que nosotros seamos,
y también al revés,
polos derretidos de abismos atrayendo a sus contrarios.

No sé

Sus manos frías me saben a Jazz,
a ron con hielo, a tardes de espera y de luna.
Pienso mientras me habla mi inconsciencia,
que me dice que mi consciencia se aburrió de esperarme y se ha ido para siempre,
y que ella ahora está sola, y yo no sé que hacer.

Mirando la tele, quién sabe por qué, se me ocurren
tragedias alternativas a la de los libros de historia:
una epidemia de un virus antivirgenes que en los 80
fue bandera de la promiscuidad,
el último trozo de suelo no pisado que fue robado el 14 de febrero,
y que fue lanzado de un globo ocular por un hombre enamorado de la luna.

Sonrío y sus manos pintadas me saben a infancias felices.

Adoro las calles porque aceptan mis ojeras y mis humores, porque nunca preguntan que pasa, y si hay suerte te invitan incluso a tomar unas cervezas.
Me gustan las calles porque saben que los paisajes duran lo que tú quieras mirar.

Detalles: ese sitio donde todos vamos de vez en cuando
a tirar los restos del naufragio por la borda,
ese lugar donde todos lloran para que nadie les diga nada
cuando en realidad quieren escuchar todo,
una espina polar me revienta las costillas en las ultimas madrugadas
y "acierto de suerte" me suena igual que "alivio de luto" pero sin tanta tragedia escondida.

Sus manos delgadas se fuman mis palabras y me apretan las costillas.

Y yo ya no sé que decir.