29.11.11

No nos faltará una razón para respirar

la nostalgia me ha visitado estos días y se ha transformado en mi compañera. el momento del año, la vida, las circunstancias, las cosas que se van y no volverán, las historias, los recuerdos, todo lo que hemos vivido se transforma en un hasta luego.

tengo miedo y no es al frío, no es a la distancia, no es miedo a perdernos, es el miedo a comenzar algo nuevo con el sentimiento de no estar preparada y sabiendo que pudiste hacer tanto, pudiste disfrutar más, decir y mostrar tanto mas. pero el tiempo nos visita queridos amigos, se acerca y nos da una bofetada, ha llegado el comienzo de algo nuevo y el adiós de algo más.

no me di cuenta cuando llegó este momento, cierro los ojos fuertemente creyendo que puedo despertar, estanco el reloj y me apodero del tiempo; retrospectiva de una vida más simple.
me da pena y nostalgia ponerme a recordar lo frágil que es todo lo que se construye a esta edad, da lo mismo que siempre parezca que puede ser distinto. esa maldita manía de pensar que las cosas siempre pueden ser diferentes es una hueá, al final.

ya no tengo por qué fingir indiferencia. aunque quisiera adoptarlo como método para la superación de capítulos de esta naturaleza (demás que vienen unos cuantos más) no me funcionaría. al final soy super mamona y sensible y ya no puedo hacer que la pena se vaya fumando. la verdad es que vivo perdiendo cosas todo el tiempo, pero nunca, nunca voy a acostumbrarme a estos episodios.

nada nunca fue en vano, nada nunca fue tan malo como para querer olvidar, gracias por las sonrisas, los abrazos, la amistad, las bromas, la comprensión, gracias por formar una familia, hemos crecido juntos y estamos justo en el término y el comienzo de una etapa y juro que no quiero que este día se acabe, no quiero tener que despedirme y no puedo evitar llorar.

espero que al final de este viaje que juntos emprendimos todos podamos sonreír, podamos recordar estos cuatro años de nuestra vida con felicidad, al menos yo reí con ganas, lloré con ganas, sentí con ganas, grité con ganas, amé con ganas y dentro de esta locura disfruté cada sentimiento y cada momento junto a ustedes.

Gracias por todo!

25.11.11

Tiempo Culiao

Un largo segundo
del que apenas queda tiempo
y un corto suspiro
apagado antes del mismo.
La atmósfera te va aplastando
bajo su peso de secretos.
Poco que hacer,
mucho por hacer.
Lagartija sin cola,
pulpo enredado.
Gracioso hasta decir llanto,
melancolía.
La atmósfera se va quedando
estrecha, reseca,
me sobran suficientes horas
para que no me quede ninguna.

16.11.11

Respirar

la libertad no se vende por unas lucas, ni por unas buenas vacaciones, ni por una cámara profesional, ni por un cartón de cigarros. la libertad es una cosa demasiado grande pa' meterla en un monedero. por tener tardes disponibles para arrancarme a la playa es que vale la pena vivir. a mí déjenme pobretona y feliz, tirada en la arena o sentada en la plaza o guitarreando en los botes o tirada en el pasto o con las patas en el agua o en cualquier parte. que si me toca estar triste en la vida sea por cosas grandes, como el amor, pero no por encierro. a una jaula no me meteré nunca.

14.11.11

Reloj

Tengo sueño y tantas ganas de correr,
cerrar los ojos fuertemente y de repente encontrarme lejos,
encerrarme a solas en una cabaña en el campo,
prender uno o dos cigarrillos y sentarme a fumar la vida.
yo sé de sobra lo que quiero y no quiero,
lo que me ayuda o me enferma,
lo que me vivifica o me enerva.
Porque yo soy la que lleva este cuerpo y esta mente,
la que lo arrastra por todos los pasillos abandonados,
porque yo soy la que, al final,
perderá esta partida
o jugará a crear otra
e inventará otro personaje.
Porque yo sé de sobra lo que es y no necesario,
sigo caminando fuerte, sin mucho cuidado;
aún es primavera y me dirijo quizá hacia mi destino,
o quizá a otra estación de paso.
Esta vez seré más lista
sin olvidarme de ser un poco tonta.
Y espero que me dejen, al menos
acordarme de quién era, de quién fui
antes de morir del todo,
antes de terminar la historia con un final inventado,
antes de que al personaje se lo lleven las horas.

11.11.11

Yo no quiero que el mundo lo sepa

Empiezo a escribir siguiendo los dictados
Del impulso incontrolable de mi mano.
Continúo con marcas en las cutículas
De los apoyos constantes del lápiz.
Al final, callo, muerta piel al principio del dedo,
Así escribo.

Comienzo otro párrafo,
la costumbre de colocar adjetivos a las cosas,
decirle al cielo que es celeste,
a la noche que es oscura,
a la necesidad insaciable de explicarme todo
que se aburra de su inmensidad.

1.11.11

Vacaciones en el más allá

guardo los secretos en mi bolsillo como quien guarda un papel en la boca. corre por el borde de sus ojos un misterio inconcluso y en su mirada perdida me encuentro y me olvido dentro de una hora en su pupila.