el tiempo avanza e intento mirar hacia adelante sin querer progresar mucho. últimamente me dejo llevar por la música, el alcohol y otras cosas que no voy a detallar aquí. mi cabeza da vueltas, el mundo da vueltas y la música se confunde con la risa de la gente, cierro los ojos y me dejo llevar por una silueta caleidoscópica que está al frente mío.
cuando sea capaz de hablar fuerte voy a hacerlo, no voy a morderme las palabras ni guardarlas en el banano, no tengo por qué hacerlo. la lengua amarra las vocales y al final no digo nada. se consume en la garganta el tiempo, como espasmo. llueve pero no aquí: muy lejos, dentro de siete u ocho horas. cuando me despierte, y otro día comience a tejer sus restos. entre restos llega la noche: acaba hoy, y no queda vestigio de nada. los barcos ya marcharon a la deriva de otra tormenta. es de noche: enero. Y ahora que me he dado cuenta de que los mensajes en botellas son inútiles, me toca empezar a vivir, aunque me falten aún unas horas.
creo, siento y veo que quieres decir algo como... si hablaras fuerte sería para despedirte?, pienso que decir las cosas, decir el todo, es la posibilidad de un nuevo "hola" o de seguir avanzando, seguir viviendo...
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