No somos, no hemos sido

Eras un cometa dentro de mis mejores poesías, pintastes las estrellas con el soplido de tu cabello, me sentí fría a penas te vi; logré evitarte (disimular).
Deslumbrabas el silencio de esta cohibida ciudad, donde hombres y mujeres se enconden en rincones para amarse, ahí ... justo aquí y de repente yo te amé, llamaste a mi nombre como nadie lo había hecho, te convertiste en Nadie y en Todo, y todos se fueron, y ahora eras solo tú.
Mis manos temblaban, ahora me mirabas fijo, de pronto salto un recuerdo de antaño; nunca Adán escribió para Eva, ni ella escribió para él; mas él siempre escribía para ellas, las estrellas, que hacían florecer sus manos, abrir capullos acumulados cerca de sus huellas digitales.
Dejé caer el paracaídas, nada me sostuvo más que el aire, me abrazó mas fuerte que nada (desesperadamente), de pronto me aferre a esta nada, a este Nadie, a este nadie y su cometa que volaba conmigo, que bailaba conmigo y no me temía, no nos temíamos; aún asi repudiaba mi nombre porque le hacía sentir cosas que no quería, al parecer, eso me hizo creer, y de pronto no me senti tan nada, pero tú seguías siendo nadie.

.. (siendo todo, para mí)

PD: Esto es eso, es crear una imagen bajo la luna en la sonrisa de tu boca (con un beso)
Escalar un par de estrellas, el cielo como sendero, nombrarle a un cometa el Uni-verso