On your own

Si de pronto me transformo en la hoja,
si de repente muerdes mi corazón como una manzana y lo dejas herido,
producto del alcohol vuelvo a sentir tus labios
pero a pesar de todo yo estoy consiente,
consiente de que no puedo olvidarte,
consiente de que eres mi enfermedad venigna y apasionante,
no sabes lo tanto que extrañaba sentirme enferma de esta manera.
Corazón de plástico, amante y blando cerca tuyo,
el suelo se desvanece y me siento árida,
-¡esto está mal!- me repito mil veces,
mil veces que no sirven de nada
porque a pesar de querer integrar otros nombres a mi vida
yo no puedo olvidarte y me lanzo a tus brazos.
Soy como el insecto adicto a tu miel,
a esa miel prohibida,
y no puedo dejar de pensar en la manera como hablabas despacito en mi cuello,
repitiendo mi nombre, diciendo que me extrañas;
si yo pudiera gritarlo, todo sería distinto.
Somos seres perdiendo el control,
deseando el cuerpo perfecto y el alma perfecta,
anhelando la perfecta manera de amar,
gritando por el amor perfecto,
pero no somos nada, ni siquiera un sueño,
porque esto no altera en nada nuestra realidad,
esta sucia realidad que carcome mis entrañas
y me hace sentir de esta manera tan absurda día y noche,
pensando mil y una vez la misma mierda;
esta misma mierda que me aleja de tus brazos y elimina mis fuerzas,
me siento como un mimo enjaulado,
prohibeme hablar, prohibeme gritar, prohibeme abrazarte, prohibeme extrañarte,
prohibe que me sienta de esta manera, haz como si nunca pasó nada,
olvida, ama el olvido, yo lo amo también,
no me siento especial, me siento hundida en un par de horas,
sintiendo esa sed de mal, repito tu nombre,
cierra los ojos, cierro los míos,
la noche agoniza y solo queda el recuerdo
y el aroma ... tu aroma impregnado en mi ropa,
mi silencio.
Aquel nombre oculto en tus pestañas,
pestañeo constante, cierra los ojos,
suprime el momento...
dentro de mi misma.

Sábado 28 de Marzo 2009, 14:35